1) Deja de perder tiempo y dinero tratando de adquirir más de todo.
Empieza a centrarte en la calidad de las posesiones, amigos y experiencias. La calidad vale más que cualquier cantidad.
Los verdaderamente “ricos” son la gente que necesita menos para ser feliz. Mucha gente compra cosas que no necesita con dinero que no tiene para impresionar a la gente que ni conoce. No pienses que la riqueza se mide en los objetos materiales. Maneja tu dinero sabiamente para que sea tu dinero el que te administre.
2) Deja de pasar tiempo con personas negativas.
Pasa tu tiempo con gente agradable que sea inteligente, emprendedora y con ideas afines. Las relaciones deben ayudarte, no hacerte daño.
Rodéate de gente que te ayude a ser la persona que quieres ser. Elije amigos de los que te sientas orgulloso/a. La vida es demasiado corta para pasar el tiempo con personas que te absorben energía.
Cuando te liberas de la gente negativa, te sientes más libre y encuentras una manera más sencilla de vivir.
3) Deja de tratar de cambiar a la gente.
Comienza a aceptar a la gente tal y como son. En la mayoría de los casos es imposible cambiar a las personas. Te ahorrarás mucho estrés innecesario. En lugar de tratar de cambiar a otros, dales tu apoyo y ejemplo.